lunes, agosto 29, 2005

(no tan)Pequeñas molestias de la vida moderna

Vivimos en la modernidad, los pros ya los conocemos, las contras también. Acá agrego algunas cosas que no llegan a hacerme infeliz, pero sí que postergan un poco mi felicidad/comodidad/bienestar/tranquilidad/paz.

Top8: (no tan)Pequeñas molestias de la vida moderna


  1. La impresora, cuando agarra más de una hoja. Bueno, es que puse a imprimir un par de cosas y a la maldita impresora se le dio por empezar a agarrar más de una hoja por vez, y se traba todo el tiempo. La odio. Me pone más nerviosa eso que ver a Tinelli. Cuando tenga plata la voy a tirar a la mierda (primero le voy a pegar algunas patadas) y me voy a comprar otra. Pero si esa vuelve a agarrar muchas hojas, voy a enloquecer. No es justo que yo me ponga nerviosa porque un aparato ande mal. Sí, puede ser que sea una loca histérica, pero igual, el aparato del orto debería andar bien. Y no la puedo mandar a arreglar porque "se come las hojas", yo que sé... Bueno, la cuestión es q estaba tan nerviosa que se me dio por pensar este top8. NERDDDD.
  2. Celulares que suenan cuando no deberían sonar. Puedo entender que alguien necesite que lo ubiquen 24 hs al día, porque yo me pongo nerviosa por la impresora, así que puedo entender (casi) cualquier delirio. Pero ubicate, loco. Me acuerdo cuando volvía de la costa, en el verano, en micro, mi intención era dormir tranquila todo el viaje. Pero resulta que a un par de boludos se les dio por mandar y recibir mensajes de texto. Ok... PERO NO LE SACARON EL SONIDO AL CELULAR (igual dormí, pero no tranquila)... Idiotas... Para que existe el "modo vibrar"? Lo tienen todos los teléfonos. Lo que pasa que al vulgo le da por pensar que tener celular, no sé... les va a dar la clase que no tienen. Entonces hacen notar que lo poseen. Supongo... debe ser por eso que no le sacan, tampoco, el sonido durante la clase, en el cine, etc. Este tema de los celulares me está volviendo loca. Porque cada vez se venden más, cada vez se renuevan más y cada vez hay más baterías que contaminan cada vez más el ambiente (sin mencionar las cada vez más ondas circulándonos invisiblemente que, seguuuuro, algún efecto nocivo van a causarnos).
  3. Las alarmas de los autos cuando se activan de noche. Y como el dueño del vehículo está durmiendo, hasta que se entera de que el ruido molesto que lo despertó proviene de su auto, tarda bastante, a veces toda la noche. Contaminación auditiva (creo). Es lo peor. Muy molesto. Y es odioso cuando no te habías percatado del ruido y alguien te pregunta:- Che, ¿qué es ese ruido? NOOOOOOO!
  4. La musicalización de todo con la misma música. No sé si será que en todos los negocios ponen la misma radio, o si en todas las radios pasan la misma música... pero lugar al que entrás, lugar donde escuchás "La guitarra de Lolo", "La camisa negra", "Dame la gasolina", "Arrancacorazones". Ya empieza a doler...
  5. Que ciertas palabras no se usen más. Y no estoy hablando de "cambiacanales", "noticioso", "pantalón vaquero", que es obvio que no se usan más. Hablo de que ahora, de repente, "anteojos" se dice "gafas", "rojo" se dice "colorado", etc. Me pone loca.
  6. Quedarse casi dormida en la cama, con la tele prendida, y cuando la vas a apagar, se traba el contro remoto. Es una situación muy particular, pero a mí me pasa seguido.
  7. Call tv. Sí, la tele está para "entretener", pero ese programa es una garompa. Encima los premios son como de... ocho pesos, muy rata. Y los otros programas que son iguales, también, insoportables. Sobre todo el que conduce el que antes estaba en Muchmusic... ¿POR QUÉ HABLA EN CASTELLANO NEUTRO? Es un pezzzzzzzzz. Y no está bueno, ojalá alguna vez entre acá y se entere. Tiene el pelo como Brandon Walsh, es un loser. Ya sé que, tranquilamente, puedo cambiar el canal y no verlo, pero el sólo hecho de hacer zapping y escuchar a un idiota diciendo: "te quedan 6 minutos, mandá un sms, te podés ganar ocho pesos". AYYYYYYYYYYYYY.
  8. Que haya tanta democracia como para que Baby Etchecopar tenga un programa de radio. No es que yo sea una facha de mierda, al contrario, el facho es Baby. Me imagino que nadie tiene la desgracia que tengo yo de escucharlo TODOS LOS DÍAS (porque almuerzo en la cocina, y ahí Jacinta [la señora que limpia mi casa] pone la radio que ella quiere, que es la 10...), pero si les pasara, pensarían como yo. En serio, ese tipo no debería tener la libertad que tiene para decir las cosas que dice. Un poco de censura en ese caso en particular, vendría bárbaro.

Bueno,

That's all, folks. Opinen y agreguen las que sufren uds.

ALEJANDRA.

viernes, agosto 26, 2005

Cosas que NO extraño de la escuela primaria

Hola! Volví. En todo este tiempo me rapé, me compré un libro de Osho, me hice católica y empecé a decir boludeces en la tele. Ah, no, esa era Jimena Cyrulnik. Bueno, entonces, lo que pasó es que no se me ocurría nada para poner y entonces, no ponía nada. Quiero agradecer a todos los que me insistían para que actualice, son muy buena gente, y ahora, los quiero un poco más.
Hoy voy a hablar, como dice el título, sobre aquellas cosas que no extraño del colegio primario. Se me ocurrió escribir sobre eso porque tengo re buenos recuerdos de esas épocas, es más, ahí conocí a la mayoría de mis amigas. Pero el otro día estaba pensando que siempre me acuerdo de las buenas cosas, entonces traté de pensar qué era lo que me molestaba en ese momento, porque me acuerdo de que siempre quería faltar. Bueno y de ahí salió esto.

Top8: cosas que NO extraño de la escuela primaria.

  1. El guardapolvo. Era lo peor. Odiaba usar el guardapolvo... Sobre todo en invierno, me ponía el buzo abajo y parecía un oso, no me podía mover, era re incómodo. Encima, nunca entendí porqué si mi escuela era privada, teníamos que usar guardapolvo blanco. Ahora que ya me egresé y tengo el título del primario y no tengo que usarlo más, pienso que el guardapolvo es lo mejor que hay para los alumnos. Porque está bien que los pibes estén uniformados (con una tela blanca, barata) para que (casi) no se noten diferencias (sociales) de ningún tipo entre ellos, además así no se arruina (tanto) la ropa. Y también estoy de acuerdo con que los chicos de escuelas privadas usen guardapolvo (como hacía yo), porque eso de que los que pagan tienen que ir vestiditos distinto por la calle para que se note que pagan, no está para nada bueno, menos en chiquitos de primaria; los adiestran desde chicos en esos hábitos de mierda que tiene cierta gente con plata (por ejemplo ir a comprar a Nike y exigir que se note bien la pipa, porque ni da gastar tanto y que no se note que es Nike...). Me enferma. Igual, no creo que hayan tenido una justificación de igualdad social en mi escuela para imponer el delantal... seguro que fue porque era un privado pero nadie tenia un mango, y si llegaban a poner uniforme, no se lo iba a comprar nadie y los padres harían un piquete.
  2. El piojicida. Era un asco porque hasta 5to grado más o menos, siempre estuve llena de piojos, no se me iban con nada, probé todos los piojicidas habidos y por haber, los peines finos (hasta el Robicombie, que venía de Israel, y en el Shule tenerlo era TOP), TODO!!! Y como mi vieja siempre venía y me decía "ponete el piojicida", le tomé bronca a esa palabra, pero mal. Lo que más me molestaba es que me lo ponía (mi mamá siempre me quería poner uno que le daba mi abuelo [que era dermatólogo] que era re fuerte y me hacía arder MAL el cuero cabelludo) y NO SE ME IBAN LOS PIOJOS. Lo peor era la revisación en natación, siempre rebotaba. Me sentía re mal por eso...
  3. Las actividades a las que tenían que asistir los padres. Era re feo porque mi mamá trabajaba y entonces no podía ir a ninguna. Me sentía re marginada. Posta. Las maestras eran medio guachas, porque era obvio que los chicos que estabamos solos cuando los demás estaban con sus papás nos ibamos a sentir pobrespibes. Mi vieja se llevaba la peor parte, porque yo le insistía mucho para que fuera, y ella nunca podía, entonces se sentía mala madre. Igual, yo siempre terminaba faltando, para no sentirme LA SOLA.
  4. Las sorpresas que preparaban las maestras en complicidad con los padres. Por el mismo motivo que la anterior. Mi mamá nunca tenía tiempo para preparar nada, entonces le decía a mi hermana PERO EN FRENTE MÍO (o sea que me enteraba de todo) o directamente, me lo decía a mí. Me acuerdo cuando nos dieron la lapicera de pluma, en 2do grado (antes escribíamos con lápiz negro), hicieron una fiesta sorpresa, todos los padres les regalaban a sus hijos una lapicera y una carta, por esa NUEVA ETAPA EN SUS VIDAS (???). A mí, mi vieja me lo contó todo y encima me mandó a que me elija la lapicera. Me elegí una Parker re linda, que tenía como un estampado de ladrillos de colores. Haberla elegido yo estuvo bueno, pero me hubiera gustado soprenderme como el resto de mis compañeros...
  5. Ir todos los días y la doble escolaridad. ERA DEMASIADO. Posta, entrábamos a las 8 y nos ibamos a las 5, o un poco antes. No es que tenía mejores cosas que hacer, porque a esa edad... no hay nada para hacer, pero igual. No estaba nunca en mi casa, no me gustaba. Encima tooooodos los días, era el re martirio. Por eso faltaba siempre. En 1er grado iba, como mucho, tres veces por semana, re vaga. Y no exagero. Lo que no entiendo es porqué mi mamá no me obligaba a ir... Cuando fui más grande dejé de faltar TANTO, porque me daba vergüenza no tener nunca una explicación de porqué había faltado. Triste. Cuando empecé el secundario, iba todos los días pero a la mañana. Ahí me empecé a preguntar cómo hacía para aguantar la doble escolaridad. Y después cuando empecé la facultad (no voy todos los días) me entré a preguntar cómo hacía para ir todos los días al secundario. Es que cuando te acostumbrás a...la vagancia/el ocio/la pasividad/la fiaca, no hay cómo remediarlo. Tanto es así, que lo que más extraño del secundario son las "siestas" (duraban mínimo 3 hs) que dormía cuando volvía... Ahora duermo hasta la hora que quiero, pero la siestas... son placenteras como...cuando tenés ganas de algo rico y pensás que no hay nada, y de repente te acordás de que tenés un marroc en la mochila... mmmm....
  6. El comedor. Era horrible, la comida era re fea, bueno algunas cosas eran buenísimas, como el arroz con albóndigas. Pero otras eran feísimas. Por ejemplo, a las milanesas se les salía el pan rayado, un asco. O el puré, que estaba mal pisado y tenía partículas grandes de papa. También estaba la opción de llevar vianda, que a mi me gustaba, pero a mi vieja le daba paja preparármela, entonces siempre volvía al comedor...
  7. La clase de música. La música está buena, a mí me gusta y todo eso, pero la clase de música siempre fue lo peor. Si no era que aprendíamos canciones cadorchas (Y SE MARCHÓ... Y A SU BARCO LE LLAMÓ LIBERTAD... de Perales... sí, Perales...), aprendíamos a tocar la flauta... POR QUÉ LA FLAUTA? NO PODÍAN ENSEÑAR A TOCAR LA GUITARRA? O EL PIANO? Algo con más onda, no sé...Bueno, igual, nos enseñaban bien, porque me acuerdo bastante y sé tocar ciertos temas, como el himno de Israel (Atikva) o el Arrorró... (no, Chipi Chipi o el Sargento Pepper, ni en pedo). Lo peor de todo fue un profesor, que creo que se llamaba Pablo, en 5to grado, el tipo era músico y tocaba la flauta traversa en una orquesta, y tenía filmados los conciertos, Y NOS LOS PASABA!!!! Un embole... un hijo de puta el tipo, tenía menos idea de lo que significa incentivar a los chicos en la música....en serio. Y a veces nos pasaba la biografía de Bach... que era medio documental, medio película, y del año de pedo. La pasó como tres veces, era una basura. Muuuuuy aburrido, pero muuuuuy.
  8. Ir a la escuela en diciembre. Lo odiaba. Lo que pasaba era que como iba a un Shule (colegio judío), faltábamos un montón en el año por los feriados religiosos (eso estaba buenísimo), pero después nos agregaban los días perdidos al final del año. Cuando todos los chicos ya estaban de vacaciones, nosotros todavía seguíamos yendo. Y no hacíamos nada, era re al pedo. Y nos moríamos de calor. Y teníamos que aguantarnos el guardapolvo de mangas largas... qué bronca.

Bueno, eso fue todo. Igual, la pasé re bien en el primario, estuvo re bueno. No lo cambio por nada. Bueno por un millón de dolares por ahí sí... pero por ahí!!! Tengo que pensarlo. No en realidad no tengo que pensarlo, porque nadie me ofreció cambiar nada por nada, así que mejor pienso en algo que sirva... como... ¿Por qué si calentás leche en el microondas no se llena de nata, como sí pasa cuando la calentás en la hornalla??? eh?!!?? ¿por qué??!!?!

Bueno, gracias por leer!!!

Besos,

Ale.

pd: COMMENTS, COMMENTS, COMMENTS!!!

miércoles, agosto 03, 2005

Trabajos que nadie rechazaría

Hoy voy a rankear 8 trabajos que nadie rechazaría, son los mejores. Todos existen, y a mí me gustaría dedicarme a cualquiera de ellos.

Top8: Trabajos que nadie rechazaría.


  1. Conducir el programa que se llama "Los mejores spas del mundo". Es un programa que dan por Discovery Travel & Adventure (creo) y lo conduce una mina. Su tarea es viajar por el mundo, probando los mejores spas cinco estrellas. Y a fin de mes, cobra un sueldo. La envidio mucho.
  2. Ser estrella de Hollywood. Hacen una película por año y les pagan millones. Las casas que tienen están bárbaras, van a fiestas re divertidas y son todos re lindos.
  3. Rockstar. Son ídolos de todos los que aprecian la buena música (estoy hablando de los verdaderos, como Mick, no como Ivan Noble). Ganan buen dinerillo, lo invierten en diversión, son amigos entre ellos y hacen giras mundiales. Está bueno. Lo malo es cuando envejecen, porque o se vuelven un mito viviente o se transforman en patéticos. La onda es morirse jóven, y transformarse en un mito no viviente... Mejor paso a la otra.
  4. Critico de restaurantes. Es buenísimo. Hay que ir restaurante por restaurante (en general los de primera categoría) probando los mejores platos. Y como saben que sos crítico, te tratan re bien. Además, siempre invita la casa, o de última paga el jefe.
  5. Diplomático en un pais paradisiaco. Pero la onda es provenir de un país intrascendente (como el nuestro) y que te toque un país también intrascendente (por ej. Costa Rica). Vivis re bien, con todos los lujos (si no, miren las embajadas, hasta de los países más pobres... la de Haití está bárbara) y con todos los privilegios. Y después volvés a tu país, y te jubilás con una jubilación de diplomático, que debe ser zarpada.
  6. Conductora de "WIld on". Es el programa que dan en E!, en que una mina (que es una diosa) viaja por el mundo y prueba la joda de cada país al que va. Al programa lo odio, no sé si porque es malísimo o si porque envidio mucho a la conductora.
  7. Trabajar en la redaccion de barcelona (o en la prod de TVR). La Barcelona es una revista de humor político, muy divertida. Me gustaría estar en la redacción, no porque sea yo un cago de risa digno de ser publicado, sino porque me gustaría pasar tiempo con los que escriben ahí (que sí lo son). Lo mismo me pasa con TVR. Se deben cagar de risa haciendo esos informes que hacen, pero lo de ellos es más complicado, porque tienen que verse todos los programas que hay (y es insalubre).
  8. Canillita (en el turno noche). Para mí sería ideal, porque tenés todos los diarios y revistas al alcance de tu mano, así que podés pasarte la NOCHE leyendo y al final del año sos experto en cultura general. Además, como es a la noche, solucionaría un poco mis problemas. También podría buscarme un empleo de serena, pero ese es más embolante (si no, pregúntenle a Pancurto, el sereno de mi edificio, que se queda dormido siempre). Aparte en general se los dan a los viejos (como Pancur).

Bueno, pedorrísimo lo de hoy, pero piénsenlo. Hay gente que la pasa bien, y encima gana mucha plata (bueno los canillitas y los serenos no, pero los otros sí).

Saludos a Pancurto,

Ale.

martes, agosto 02, 2005

Cosas que no hago más

Hoy voy a clasifiar 8 cosas que dejé de hacer en los últimos tiempos. Creo que mi creatividad/imaginación/inspiración está llegando a su fin y por eso, la página caducará en breve. Mientras tanto, esto es lo que tengo para decir hoy.

Top8: Cosas que no hago más.

  1. Estudiar derecho. Dejé. Hice un cuatrimestre, pensé que mi futuro estaba por ahí, le puse empeño (bueno, no tanto) y obtuve buenos resultados: por un lado, buenísimas notas (y sí, con algo me la tengo que creer), por el otro, darme cuenta de que no era lo mío, de que en realidad lo odio, y es todo lo que no quiero ser. Igual, conocí linda gente en la facultad (física e interiomente).
  2. Comer pollo. Desde que vi un informe en un programa sobre los pollos industriales, lo abandoné para siempre. Crian pollos como si fabricaran autos. Es horrible. Si bien un pollo criado en una granja tiene el mismo destino que un pollo industrial (el matadero), por lo menos el primero, lo poco que vive, vive una vida de pollo buena. A los pollos industriales los tienen hacinados como sardinas enlatadas (y sufren, está probado, lo vi en un documental en Animal Planet) y los ponen en cintas transportadoras. Es de terror. Además les inyectan proteínas para que engorden más rápido (y eso afecta a los chicos en crecimiento y a las mujeres en envejecimiento). Cualquiera podría decirme que entonces puedo comer pollo de granja. No, no puedo. Primero porque no me pueden garantizar que sea criado en una granja (no le creo a los polleros), y segundo, porque el pollo cocinado conserva mucho la forma del cadáver y me da impresión. ¡¡¡No coman más pollos industriales!!! Es por su bien, por el de los pollos y por el de los granjeros chicos que no pueden (por suerte) montar esas fábricas, que los están mandando a la ruina. Y no se crean esa de que gracias a los pollos industriales, se abaratan los costos y más gente puede acceder al pollo. Hay mejores formas de que los pobres coman pollo, como por ejemplo, mejoras en los sueldos, en la seguridad social y etc., etc., etc. Dicho sea de paso, también estoy tratando de dejar de comer carne de todo tipo (o sea, volverme vegetariana) . Lo estoy logrando, pero a la carne que hace mal (salchichas, hamburguesas, fiambre) es dificilísimo dejarla. "Si un hombre aspira a una vida correcta, su primer acto de abstinencia es el de lastimar animales" - León Tolstoi.
  3. Tomar sol. Soy muy blanca, no me quemo y encima me aburro tomando sol. Igual, siendo tan blanca, es mejor que no tome sol, porque me hace mal a la piel. AH, y ahora tiene onda ser pálida en verano. O por lo menos, es lo que me gusta creer.
  4. Correr. Creo que desde que terminé el secundarió, no corrí nunca más. La de gimnasia nos hacía correr 20 min al rededor del gimnasio, que era re chico. No sólo me moría de la agitación, sino que me cagaba de embole. Antes de las clases, pensaba en cosas para pensar durante los 20 min. Era un bajón. La única materia que siempre me costó aprobar fue gimnasia (en el secundario, porque en la primaria era buena, hasta para los deportes, aunque Ud. no lo crea...). Igual, sé que un poco de actividad física me haría bien a la salud. Me anoté un par de veces en un gimnasio, pero no funcionó. De todas formas, no pierdo las esperanzas, voy a volver a intentarlo. Lo que nunca voy a hacer es salir a correr (ni el colectivo, prefiero perderlo) o correr en la cinta eléctrica (un embole, me sentiría una boluda).
  5. Ver televisión de aire. Es muy mala. Salvo excepciones (TVR, Indomables, Los simpsons y un par de novelas que me enganchan), no veo nada. Y a las excepciones las veo de vez en cuando. Ya no aguanto ni los programas de chismes. Igual, no es que dejé de ver televisión, el maldito cable me tiene esclavizada, amo las series yankis, sé el argumento de casi todas y miro, regularmente y con disciplina, varias. No, no me siento orgullosa, pero es lo que soy, y bueno.
  6. Usar tacos. Tampoco es que hubo algun momento en que usé mucho zapatos con tacos, pero para fiestas y eso, sí. Ahora, no uso ni se me ocurre usar, nunca más. Ni siquiera los miro en las vidrieras. Son lo peor. Y hay argumentos feministas que me apoyan (bah, en realidad, yo los apoyo). Pero básicamente, no los uso porque son incómodos. La única ventaja que tienen es que hacen buen cuerpo. Pero lo mío es insolucionable, así que, ya fue.
  7. Despertarme temprano. Porque me gusta estar despierta de noche y dormir bien y mucho. Y eso no es compatible con despertarme temprano. Salvo que no tenga otra opción (porque tengo que hacer un trámite, ir a dar un examen, o algo), no me asigno ninguna tarea antes de las 14:00. Y muchas veces necesito despertador. La gente piensa que soy una vaga de mierda, y no se equivoca, pero no porque duerma hasta tarde (porque podría tener una vida productiva en horario nocturno), sino porque no hago una mierda, no importa la hora que sea. No me enorgullece, me hace sentir mal, es un tema complejo y largo, pero lo trato con mi psicóloga. Igual, recordemos que ahora estoy de vacaciones, así que está bien que descanse.
  8. Pedir otra bebida sin alcohol que no sea Coca Light. Soy adicta. Me encanta. No tomo otra cosa, salvo que esté en mi casa y que se haya acabado, en cuyo caso tomo soda. Pero si salgo, pido Coca Light. Y si salgo de noche a tomar algo con mis amigas, me pido algo con alcohol para no ser mala onda, pero interiormente deseo consumir Coca Light. Igual, si voy a comer a la casa de alguien y no hay, no soy asquerosa, tomo lo que haya. Soy una buena invitada.

Bueno, eso es todo. Hay algunas otras cosas que ya no hago más (pero había que poner 8...) y otras que empecé a hacer (pero ese no era el tópico de hoy, ni el de mañana).

Gracias por leer las cosas que escribo, y MUCHAS gracias por dejar comments. Alimentan mi autoestima, que es lo único flaco que tengo.

Saludos,

Alexa.